¿Cómo reducir los costes de una empresa?

Aquí te exponemos algunas soluciones

Dentro de una empresa, uno de los mayores quebraderos de cabeza son los costes ya que en gran medida determinan cuál será la ganancia o pérdida de la empresa. Para asegurar que la reducción de costes sea exitosa, deben estar en línea con la cultura de la empresa y con los objetivos que se quieran alcanzar.

En primer lugar, definiremos el concepto de coste, siendo este el consumo, valorado en dinero, de bienes utilizados en la producción o de la prestación de servicios que constituye el objeto de la empresa. Podemos clasificarlos de la siguiente manera:

  • Costes variables, los cuales repercuten directamente en la fabricación de un producto o prestación de un servicio.
  • Costes de estructura costes fijos, que se mantienen de forma continuada y son ajenos a la actividad normal de la empresa, es decir, aquellos que se tendrían aunque no se vendiese nada.

Tras ello, la finalidad de la reducción de los costes es mejorar las ganancias o los flujos de efectivo, contrarrestando una pérdida de rentabilidad en los resultados operativos a corto plazo.

Es esencial saber cómo está variando la estructura de gastos de la empresa. Para ello, hay que comparar los estados financieros de este año con los que tuvo la empresa en los cuatro periodos anteriores, y comparando, a su vez, los resultados sobre las ventas, para comprobar si el crecimiento de estos ha sido de manera sostenible o, en cambio, están reduciendo la rentabilidad de la empresa.

Con este análisis, conseguimos saber las eficiencias que se pueden realizar dentro de la empresa. Si además este análisis, lo hacemos también de la competencia, pueden surgir estrategias muy interesantes.

¿Qué más opciones hay?

Otra opción es revisar los contratos con los proveedores para mejorarlos, buscando nuevas políticas que permitan a la empresa financiarse durante un periodo de tiempo superior.

Mejorar las técnicas de producción y calidad, permitiéndonos esto reducir las mermas, y con ello, hacer un mejor uso de las materias primas. Junto a ello, hay que reducir stocks, pues lo único que hacen es coger polvo en el almacén y no reportar nada a la empresa.

También existe la posibilidad de subcontratación de servicios (outsourcing), ya que de esta manera no tendríamos personal permanente.

Es muy importante tener en cuenta que es viable aplicar estrategias que requieren un cambio radical en la estructura organizacional de la empresa a través de una reingeniería. Por ello, el plan de reducción de costes debe estar claramente definido y las responsabilidades delegadas.

En Capazita te ayudamos en el proceso de gestión e innovación que necesitas para llevar tu empresa al siguiente nivel.

No dudes en contactar con nosotros, queremos conocer tu proyecto.